La semana pasada estuvimos comprobando como existían sustancias que se mezclaban con el agua, se disolvían, mientras otras como el aceite no lograban disolverse.
En esta ocasión el experimento que teníamos planteado necesitaba de dos momentos con al menos un día entre medio.
Les planteamos la necesidad de crear un barquito sin hacer uso de papel ni de plastilina.
Quien quiso sin repetir hizo su barco a su manera....
Un vaso de cristal con una hoja-vela
Aprovechando las construcciones de madera
Usando las sillas de la clase
Formando un barco de vela usando los libros de la biblioteca
Y por último construyéndolo con las piezas de plástico de la asamblea.
Todos eran barcos muy válidos sin embargo sin embargo no era lo que nos valía para el experimento de hoy.
Necesitábamos para esta ocasión unos barcos especiales , en esta ocasión serán barquitos hechos con cubito de hielo de colores.
Por esta razón el experimento se iba a preparar en dos sesiones.
En la primera sesión que se hizo el jueves pasado preparamos la cubitera, fuimos tiñendo el agua con pintura, café, colorante alimenticio, pimienta....
Con mucho cuidado se rellenó las cubiteras que una vez listas se metieron en el congelador de la sala de profesores para así esperar que se congelara el agua.
Una vez nos reunimos de nuevo para experimentar nos dividimos en tres grupos. Cada grupo tenía una bandeja y en su interior echamos aeite corporal de bebé.
Les propusimos jugar cada uno con un cubito de hielo, había que intentar derretirlo dentro de la bandeja.
El agua y el aceite nunca se van a mezclar, no se van a disolver juntos.
El agua es como un imán, con polo positivo y polo negativo, mientras el aceite de bebé no tiene polaridad, por eso ni se atrae ni se repele con el agua.
Agua y aceite no se relacionan , no se mezclan, además recordemos que el aceite es menos denso que el agua, de ahí que las burbujas de agua se vayan al fondo mientras el aceite se queda en la parte de arriba de la bandeja.
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