La llegada a un sitio nuevo cuesta entre otras cosas porque puede que no conozcamos a nadie o a casi nadie, porque el espacio es nuevo, los horarios…por eso tanto adultos como niños tenemos que pasar un tiempo a veces de caos, de incertidumbre pero que una vez pasado quedará lo que se viva esos días como meras anécdotas.
Vuestros niños y niñas son los que sobre todo están viviendo este periodo de adaptación y por eso desde la escuela tenemos la obligación de amenizar este tiempo, contando siempre con la ayuda de vosotros que desde casa animaréis preguntándole que han hecho por la mañana en el cole, aprovechando las fotos que tenéis para que os cuenten algo de lo vivido en el día.
Poco a poco se van “metiendo” en la rutina diaria, se van introduciendo nuevos momentos con nuevas actividades una vez las primeras propuestas se van afianzando.
Llevamos mañana una semana juntos y la mayoría por ejemplo al entrar ya sabe que tiene que colgar su mochila y sentarse en la asamblea, o tocamos el silbato al llegar al patio los niños de 4 y 5 años y se colocan en la zona habilitada para entrar en nuestro edificio…
Tras el recreo la mayoría de las veces estamos planteando actividades para lograr la cohesión del grupo, porque uno de los objetivos que tenemos que lograr en estos días primeros es conocernos, “hacernos amigos” como dicen ellos, ser un grupo, un equipo, el equipo de 3 años A
Podíamos haber hecho esta actividad en el patio, en el gimnasio con mucho más espacio pero la mañana se presentó algo lluviosa, así que no nos quedó más remedio que jugar, algo apretados en nuestra mini clase.
¿Conocéis el juego de la silla no? Pues igual pero con aros, hemos bailado al ritmo del cantajuegos. Teníamos muchos aros de colores situados por toda la clase y bailábamos libremente con la única consigna de meternos dentro al pararse la música.
Hay quien como Víctor Tomás prefiere apartarse del grupo y bailar junto a un aro situado junto a la clase de la seño Mari, y es que nadie se había percatado que había aros por aquella zona.
Otros como Ana María o Rubén Sánchez bailan todo el tiempo dentro de un aro, pensando “así no me lo quitan”, sin darse cuenta que no siguen las reglas del juego cada uno a su forma, al final la primera vez ganó Víctor y en segundo lugar Marcelo, sin embargo ellos se lo pasaron tan bien que no caían en la cuenta de que cuando no tenían aros y los íbamos sentando en los bancos estaban eliminados.
Os dejo algunas de las fotos que tomé en este momento, mirad sus caras…¿no se lo pasan mal, eh?
Vuestros niños y niñas son los que sobre todo están viviendo este periodo de adaptación y por eso desde la escuela tenemos la obligación de amenizar este tiempo, contando siempre con la ayuda de vosotros que desde casa animaréis preguntándole que han hecho por la mañana en el cole, aprovechando las fotos que tenéis para que os cuenten algo de lo vivido en el día.
Poco a poco se van “metiendo” en la rutina diaria, se van introduciendo nuevos momentos con nuevas actividades una vez las primeras propuestas se van afianzando.
Llevamos mañana una semana juntos y la mayoría por ejemplo al entrar ya sabe que tiene que colgar su mochila y sentarse en la asamblea, o tocamos el silbato al llegar al patio los niños de 4 y 5 años y se colocan en la zona habilitada para entrar en nuestro edificio…
Tras el recreo la mayoría de las veces estamos planteando actividades para lograr la cohesión del grupo, porque uno de los objetivos que tenemos que lograr en estos días primeros es conocernos, “hacernos amigos” como dicen ellos, ser un grupo, un equipo, el equipo de 3 años A
Podíamos haber hecho esta actividad en el patio, en el gimnasio con mucho más espacio pero la mañana se presentó algo lluviosa, así que no nos quedó más remedio que jugar, algo apretados en nuestra mini clase.
¿Conocéis el juego de la silla no? Pues igual pero con aros, hemos bailado al ritmo del cantajuegos. Teníamos muchos aros de colores situados por toda la clase y bailábamos libremente con la única consigna de meternos dentro al pararse la música.
Hay quien como Víctor Tomás prefiere apartarse del grupo y bailar junto a un aro situado junto a la clase de la seño Mari, y es que nadie se había percatado que había aros por aquella zona.
Otros como Ana María o Rubén Sánchez bailan todo el tiempo dentro de un aro, pensando “así no me lo quitan”, sin darse cuenta que no siguen las reglas del juego cada uno a su forma, al final la primera vez ganó Víctor y en segundo lugar Marcelo, sin embargo ellos se lo pasaron tan bien que no caían en la cuenta de que cuando no tenían aros y los íbamos sentando en los bancos estaban eliminados.
Os dejo algunas de las fotos que tomé en este momento, mirad sus caras…¿no se lo pasan mal, eh?
No hay comentarios:
Publicar un comentario